he aquí, el desahogo...
Es difícil darse cuenta de lo que se ha visto todos los años de su vida. Tiene un cierto nivel de complejidad romper con aquellos esquemas con los que uno ha vivido y ha interpretado lo que quiere interpretar, sin darse cuenta de lo que realmente es.
Pero ¿qué existe realmente?
Dicen que el ser humano acostumbra a pensar diariamente los mismos
pensamientos que el día anterior. Yo diría que ese es el principal problema por
el que todos tengamos nuestros debrayes "mala copa", porque no nos damos cuenta
de que ese pequéñísimo problema tiene una solución. Y peor aún, nos enfrascamos,
nos bloqueamos, etc etc etc...nos mutilamos a nosotros mismos.
Pero ese no era el punto. En base a esto, tengo que admitir que hay momentos en los que nos engañamos a nosotros mismos. A veces queremos creer que contamos con alguien o tenemos el apoyo de EQUIS personas, cuando en eso analizamos fría y calculadoramente cositas y piedritas que se han ido guardando en el zapato.
Lo difícil es darse cuenta de que al final, uno no está tann acompañado como creía.
Que aquellas personas que decían-se ser tus supercarnales, pues, realmente no lo son.
Es duro darse cuenta de estas cosas chistosas. Es duro dejar de tomar en cuenta a alguien porque te han dejado de tomar en cuenta a ti.
Pero para que malvibrarse?, ¿para què seguir afirmando lo que ya se captó y seguirle dedicando energías a cosas que no lo valen?
Nadie es perfecto. Pero algunos tendemos a considerar más a la gente que queremos que otros. O será que soy demasiado maricona a veces¿? No lo sé. Al final soy, quiero y estoy. Y definitivamente a quien quiero más es a TI.
No hay comentarios:
Publicar un comentario